Descubre la auténtica receta de la fabada asturiana de la abuela: ¡un manjar que te transportará a Asturias!

1. Ingredientes tradicionales para una auténtica fabada asturiana

La fabada asturiana es uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía asturiana y de toda España. Su receta tradicional se caracteriza por utilizar ingredientes autóctonos que le otorgan su sabor único y distintivo.

En primer lugar, la fabada asturiana se prepara con fabes, un tipo de alubias blancas de gran tamaño y textura mantecosa. Estas alubias se cultivan en la región desde hace siglos y son la base fundamental del plato.

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Además, la fabada asturiana requiere de embutidos de calidad, como el chorizo asturiano y la morcilla. El chorizo asturiano se caracteriza por su sabor ahumado y picante, mientras que la morcilla aporta un toque de dulzura gracias al arroz y cebolla que se utilizan en su elaboración. Estos embutidos son indispensables para darle el sabor característico a la fabada.

Por último, no podemos olvidar el ingrediente estrella de la fabada asturiana: el tocino. Esta pieza de carne de cerdo se utiliza para darle un sabor intenso y jugoso al plato. Se recomienda utilizar tocino fresco y en trozos grandes, para que se cocine lentamente y se impregne de todos los sabores de los demás ingredientes.

2. Paso a paso: cómo cocinar la fabada asturiana a la perfección

La fabada asturiana es uno de los platos más representativos de la gastronomía asturiana. Con sus ingredientes principales como la faba, el compango y el chorizo, este guiso tradicional es una auténtica delicia que merece ser cocinada a la perfección. En este artículo, te explicaremos paso a paso cómo hacerlo de forma sencilla y deliciosa.

Ingredientes necesarios

  • 500 gramos de fabas asturianas
  • 200 gramos de compango (morcilla, chorizo, tocino)
  • 1 cebolla grande
  • 4 dientes de ajo
  • Aceite de oliva
  • Sal al gusto

Paso 1: Preparación de los ingredientes

En primer lugar, debes remojar las fabas asturianas durante al menos 12 horas en agua fría. Esto ayudará a ablandarlas y reducir el tiempo de cocción. Una vez pasado el tiempo de remojo, escurre el agua y reserva las fabas. A continuación, corta el compango en trozos medianos, pica finamente la cebolla y los dientes de ajo.

Paso 2: Sofrito inicial

En una olla grande, calienta un chorrito de aceite de oliva a fuego medio. Agrega la cebolla y los ajos picados y sofríe hasta que estén dorados y fragantes. A continuación, incorpora el compango y déjalo freír durante unos minutos hasta que suelte su grasa y aromas.

Paso 3: Cocción de las fabas

Añade las fabas escurridas a la olla y cubre con agua. Añade sal al gusto. Lleva la olla a ebullición y, una vez que hierva, reduce el fuego a medio-bajo. Deja cocinar la fabada durante aproximadamente 2 horas, o hasta que las fabas estén tiernas y los sabores estén bien integrados. Se recomienda remover de vez en cuando para evitar que las fabas se peguen al fondo de la olla.

Con estos sencillos pasos, estarás más cerca de cocinar la fabada asturiana a la perfección. Recuerda que es un plato que merece tiempo y dedicación, pero el resultado final será completamente satisfactorio. ¡Buen provecho!

3. Trucos y consejos para mejorar tu fabada asturiana


Si eres amante de la gastronomía asturiana y quieres llevar tu fabada al siguiente nivel, hoy te traigo algunos trucos y consejos que seguramente mejorarán el sabor y la textura de este delicioso plato.

1. Elige los mejores ingredientes

La fabada asturiana no sería lo mismo sin sus principales ingredientes: fabes, compango y panceta. Para garantizar un resultado espectacular, asegúrate de elegir fabes de alta calidad, preferiblemente de la variedad “fabes de la granja”. El compango, que consiste en chorizo, morcilla y tocino, también debe ser de buena calidad y fresco.

Para resaltar aún más los sabores, considera la posibilidad de incorporar ingredientes adicionales como oreja de cerdo o lacón ahumado. Estos aportarán una mayor complejidad al plato y sorprenderán a tus comensales.

2. Remoja las fabes correctamente

El remojo previo de las fabes es fundamental para lograr una textura cremosa y tierna. Antes de cocinarlas, déjalas en remojo durante al menos 12 horas. Asegúrate de cubrir las fabes con agua fría y añade sal. Esto ayudará a que se hidraten correctamente y se cocinen de manera uniforme.

Recuerda que durante el remojo es normal que las fabes aumenten de tamaño, así que asegúrate de utilizar un recipiente lo suficientemente grande para evitar desbordamientos.

3. Controla el tiempo de cocción con precisión

La cocción de la fabada asturiana es un proceso lento y constante. Para lograr una textura perfecta, ten en cuenta que el tiempo puede variar dependiendo del tipo y la calidad de las fabes.

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Generalmente, se recomienda cocinar las fabes a fuego medio-bajo durante aproximadamente 2 horas. Sin embargo, algunos cocineros expertos sugieren aumentar este tiempo hasta las 3 horas. La clave está en probar las fabes de vez en cuando para asegurarte de que estén tiernas pero no deshechas.


4. Dónde encontrar los mejores ingredientes para tu fabada asturiana

La fabada asturiana es uno de los platos más emblemáticos de la cocina española. Su sabor único se debe en gran parte a la calidad de los ingredientes utilizados. Si quieres hacer una fabada auténtica, es importante saber dónde encontrar los mejores ingredientes.

El primer ingrediente clave son las fabes, también conocidas como judías blancas. Estas deben ser de la variedad “granja” o “faba de la Granja”, originales de Asturias. Puedes encontrarlas en tiendas especializadas en productos asturianos o en mercados locales.

Otro ingrediente fundamental es el compango, que consiste en una combinación de embutidos asturianos como la morcilla, el chorizo y el tocino. Estos embutidos deben ser de primera calidad para aportar el sabor característico a la fabada. Busca carnicerías locales o tiendas de productos gourmet para encontrar el compango perfecto.

Además de los ingredientes principales, también es importante incluir un buen caldo de carne, preferiblemente casero. El caldo de carne le dará un sabor extra y ayudará a cocinar las fabes de manera adecuada. Puedes hacer tu propio caldo o comprarlo en tiendas especializadas en productos de calidad.

5. Variantes y acompañamientos para darle un toque personal a tu fabada asturiana

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Variantes de la fabada asturiana

1. Fabes con almejas: Una variante popular es añadir almejas a la fabada asturiana. El sabor salado y marino de las almejas se combina perfectamente con los sabores ricos y ahumados de los ingredientes tradicionales de la fabada. Puedes agregar las almejas al final de la cocción para que conserven su textura y sabor.

2. Fabada con chorizo picante: Si quieres darle un toque más picante a tu fabada, puedes añadir chorizo picante. El chorizo picante agregará un poco de calor a tu plato sin dominar los sabores tradicionales. Puedes añadirlo junto con los demás ingredientes y cocinarlo a fuego lento para que los sabores se mezclen.

3. Fabada vegetariana: Si eres vegetariano o simplemente quieres probar una versión más ligera de la fabada asturiana, puedes preparar una fabada vegetariana. En lugar de los ingredientes de origen animal, puedes utilizar legumbres como la soja, el tofu o incluso añadir más verduras como zanahorias y calabacines. Asegúrate de sazonar bien la fabada vegetariana para obtener sabores deliciosos.

Acompañamientos para la fabada asturiana

1. Pan casero: Nada complementa mejor una deliciosa fabada asturiana que un trozo de pan casero. Puedes hornear un pan rústico o tradicionalmente asturiano para acompañar tu plato. El pan absorberá los jugos de la fabada y te permitirá disfrutar de cada bocado.

2. Sidra asturiana: La fabada asturiana se marida a la perfección con una buena sidra asturiana. La sidra es refrescante y equilibra los sabores ricos y grasos de la fabada. Sirve la sidra bien fría para disfrutar de una experiencia completa.

3. Ensalada verde: Para equilibrar los sabores intensos de la fabada asturiana, puedes preparar una ensalada verde fresca y crujiente. Las hojas verdes, como la lechuga, la espinaca o la rúcula, añadirán un contraste refrescante al plato. Puedes aderezar la ensalada con una vinagreta ligera o simplemente con aceite de oliva y limón.

En resumen, existen varias variantes y acompañamientos que puedes utilizar para darle un toque personal a tu fabada asturiana. Desde agregar almejas o chorizo picante hasta preparar una fabada vegetariana, hay opciones para satisfacer todos los gustos. Además, complementa tu plato con pan casero, sidra asturiana o una ensalada verde para una experiencia aún más deliciosa.

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